Esa flor
A gritos pedí una flor; me preguntaron por qué.
Les dije: que yo no sé, que necesito una flor.
Sonrieron con ironía, no comprendieron mi prisa.
Agonizaba en la espera, y me moría de amor.
Sabía que aquella flor, que esas manos mezquinaban.
Iba a curarme una herida, que no estaba equivocada.
Y aquella tarde florida, del día de los amores.
Vi. Pasar por las veredas, muchas doncellas con flores.
Y hasta mujeres mayores, ostentosas por las calles.
Podían hacer alarde, de ramilletes hermosos.
Y yo sentada a la vera de ese camino florido.
Sin un novio, sin marido, sin amante, sin consuelo.
Allí, arrojada en el suelo, exhalé como un suspiro.
Parecido al del exilio, del que marcha para siempre.
Pero sentí de repente, unas manos que se abrían.
Y aprisionaban las mías, muy apasionadamente.
Me entrego una flor muy bella, casi como su mirada.
Y me sentí enamorada, como una adolescente.
Autora :Alicia Celada (Argentina)
Pintura « Éclosion du regard ».de la artista Francesa: Pauline Chevallot
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