El asomo

Cuando el cielo en su magnitud se nos mete por los ojos y los convierte en estrellas, no importa demasiado que los techos tengan las chapas rotas. Cuando se tiene una orquesta de grillos en el estómago, no importa demasiado que el hambre se trepe por el interior del cuerpo como una serpentina. Cuando se tiene un puñado cálido de amor, para untarse el cuerpo de gloria, no importa demasiado que las mantas tengas ventanas para espiar el invierno. Mientras los grillos ejecuten salmos celestes y se filtre una luz por las ventanas averiadas del alma, entonces si, nada, absolutamente nada, importa demasiado. Autora: Alicia Celada Pintura:cielo de tempestad, del Artista Venezolano: Merbaldo Enrique Hernàndez Ramos