Entre tus brazos danzando,
me siento casi una reina.
Me embarga tanta ternura,
que en tus brazos pareciera,
que el tiempo danza en la sala,
y el mismo se detuviera.
Y miro tu tierno rostro,
como una dulce promesa,
que nunca vas a dejarme,
sin bailar en una fiesta.
porque aunque pasen los años,
y mi cuerpo se encogiera,
tu figura de gigante,
sujetara con mas fuerza.
Y entre tus brazos danzando,
yo me sentiré una reina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario